martes, 28 de febrero de 2012

Martes 28


Al consultar encontraremos muchísimas oraciones ninguna rechazable; una nos ha dejada como heredad del Señor Jesús, y una a nuestra madre de todos, la Virgen María, el santo Rosario, en el cual meditamos los misterios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre nuestro y los muchos “te queremos”, como Madre no se queda con nada, todo lo da su Hijo, trasmitido en perlas de amor, como nuestra embajadora. Esta también, la oración personal, cuando hablamos con Dios sobre tantas cosas particulares. El señor nos indica que seamos sinceros en la oración, que seamos conscientes, que nuestra oración sea directa, Dios escudriña hasta nuestros pensamientos. Dios lo sabe todo y queda en espera para ver nuestro comportamiento, para ver si somos consecuentes de pensamiento, palabra y obra.

Esta también la oración comunitaria donde se cumple la promesa del Señor “Pues donde están dos o tres reunidos en mi Nombre, allí estoy yo, en medio de ellos.» (Mt.18, 20) pero lo particular de la oración es que la hacemos mal en un gran porcentaje, nuestra mente loca, nos lleva a otras situaciones, es difícil permanecer al frete de Dios en dialogo, nuestra imaginación es fugas y es porque el cuerpo no sabe y no puede ver la presencia de Dios y para evadir la mente se va. De tal manera que es necesario el ayuno y sacrificio para que el cuerpo disminuya y sea nuestro espíritu y alma quieres se fortalezcan con la gracia otorgada por Dios.

Cuando se hace difícil la oración es síntomas que debamos entrenar mas, a medida que oremos vamos haciendo mejor la oración, recuerdo que me subía al bus urbano y por falta de tiempo trataba de hacer santo Rosario pero escuchaba la voz de las personas el ruido interior y exterior, la distracción de vista; fui progresando y llego el momento en que pude orar sin distracciones exteriores.

Hoy el Señor nos regala el Padre Nuestro, cuyo contenido tiene un proyecto de vida y compromiso, una interacción de la creatura con su Creedor, en verdad y en espíritu; donde se le reconoce, se le ama y se le acepta; donde manifiesta su bondad y su don, se hace una premisa la hermandad, donde se hace visible su poder frente a la acción del enemigo. Oración que debe estar directamente relacionada con nuestro acontecer consciente minuto a minuto.      

No hay comentarios:

Publicar un comentario