martes, 5 de agosto de 2014

Señor, Tú tienes palabras de vida eterna." Jn 6, 68


“¿Por qué gritas por tu herida? Tu llaga es incurable; por el número de tus crímenes, por la muchedumbre de tus pecados”… Serán sus hijos como en otro tiempo… “Vosotros seréis mi pueblo, y yo seré vuestro Dios.” Pero será en todo caso, necesaria la conversión por fe y por amor a Dios. “desde el cielo se ha fijado en la tierra, para escuchar los gemidos de los cautivos y librar a los condenados a muerte” ¿Quién otro o que cosa podrá librarnos de la muerte? “¿qué es el hombre, para que te acuerdes de él?” el único razonamiento conclusivo es porque Dios es “Amor”. Por eso vino a multiplicar lo necesario para nuestro bien y a caminar sobre las aguas para que tuviéremos fe.

«¡Qué poca fe! ¿Por qué has dudado?» Poca fe – Este reproche del Señor es para sus mejores discípulos, también para nosotros hoy día, a fin de convencernos de que todavía nos falta mucho (cf. 6,30; 8,26; 16,8; 17,20). De la misma manera, Nuestro Señor, en varias ocasiones invitaba a no tener miedo, a confiar en Él; pero para nosotros faltaría una y otra cosa más, para poder creerle a Dios. En primer lugar si no cresemos espiritualmente, es porque no meditamos – es porque no hablamos con el dueño y Señor de todo. Mientras tanto no podremos confesar como sus discípulos: «Verdaderamente eres el Hijo de Dios» (Mt 14,33).

Todos habremos visto en los barrios o en lugares donde a la gente le parece cómodo botar las basuras. Para corregir estas culturas se colocan avisos prohibitivos, se hacen campañas de limpieza, de concientización, de educación. Pero lo grave es que por más que se luche seguirá apareciendo basuras. Lo mismo pasa con nuestras culturas de pecado, Dios dice, sus servidores lo pregonan y el hombre no deja de mentir, de robar, de odiar, de matar, no deja la avaricia, la injusticia… larga lista. A todo esto, así veamos a Cristo en la Cruz para darnos vida, así lo veamos multiplicando nuestro pan o caminando sobre las aguas de este mar agitado.


No hay comentarios:

Publicar un comentario