martes, 31 de enero de 2012

Martes 31

"¿Quién tocó mi manto?" - ¿Quien ha hecho una petición con fe? de Dios sale la fuerza de su amor por los que sufren, cundo le pedimos con fe. La fuerza del amor de Dios que resucita a la vida, que cura, que salva, que libera y que llena de paz.

¿Porque el motivo de nuestra confianza en Dios? Es nuestra fe, el reconocimiento y la aceptación del inmenso amor de Dios, que permanentemente manifiesta a sus criaturas en la actualidad, igual que lo hacía de acuerdo a lo narrado en las Escrituras. Hoy también se producen los milagros de sanación, de liberación y de vida, en muchísimas personas, cuando hay verdadera fe en la fuerza de su amor creador.

El Señor Jesús hoy no dice que todo el acontecer de calamidad, de injusticia denigrante, se debe a la falta de fe, a la falta de confianza en Dios, a la falta de reconocimiento de nuestro Dios que todo lo puede, a la falta de la fuerza de su amor; todo está dormido como dijo de la hija de Jairo. Debemos despertar en la fe en nuestro Creador, nuestro Redentor, nuestro Dador de vida. 

Encontramos en el pasaje de hoy un reproche de sus discípulos, que corren con Jesús a sanar a la hija de Jairo, con la presencia de una mujer humilde, incapaz de molestar al Maestro, movida solo por su fe. También a nosotros nos puede pasar, nos fundimos en la religiosidad y no vemos al necesitado que con fe pide la acción del Señor, pasamos de largo frente al necesitado; dejamos de lado el Evangelio de san Mateo (5), la obra del buen samaritano (Lc. 10-27 s) pero al amor de Dios nada escapa.